viernes, 7 de octubre de 2011

Sobre la poderosísima capacidad de ser la única persona que puede hacerte daño de verdad

martes, 30 de agosto de 2011

Y noches sin ella? y días huecos en verdad. Días vacíos sin calor y sin pecas que contar. Y ya van nueve meses, verdad? y en nueve meses no me he podido serparar más de 2 semanas de ella. No quiero estar sin ella, me he acostumbrado tanto a su risa, a sus cariños, a su piel, a su lengua, a sus juegos; a sus tacos, a sus vestidos, a sus jeans; a sus links, a su música.
De verdad quiero más, de verdad quiero vida, quiero despertar y estar ahí; calentito en su cuerpo con la cara metida entre sus cabellos y que me mire y "pancito".
Y hace poco más de un año ella me preguntó cuánto duraba la hora de almuerzo y en poco tiempo le voy a preguntar si se quiere casar conmigo. Con casa, bebito, carro, muebles vintage y todo
Pancito
Pantito

viernes, 17 de junio de 2011

(r)

Y aunque la noche sea corta, con apenas un par de horas de ti; pues igual se siente genial poder hundirme en tu piel, oler a Fiorellita y enternecerme con ruiditos engreídos de bambina chusquita.

Que no se acaben las noches de ti; quiero que cuando despierte estés siempre ahí.
Y miau miau en tu boca.

viernes, 10 de junio de 2011

7

Hola! qué hay de la noche? qué hay de tú y ella y su sonrisa mjmjmjmjmjm con los ojos encapotaditos y las pequitas que bailan en su nariz? Pues eso mismo. Todas las noches mirándola despacito y sintiéndola bonito mientras miau miau ella habla, abre los ojos bien grande, se rie tapándose la boca o se contorsiona haciendo figuras con su cuerpo. Pues así pasan mis noches y por eso quisiera tener siempre días de esas noches.

Se rompió el pies, sabes? mientras hablaba sonriendo y no le daba importancia, ella por dentro como q se quebraba. Estuve ahí con ella acompañándola mientras se recuperaba. Estuve en su cama mirando películas de asesinos, de mujeres nerviosas al borde de un ataque, de la menor de las Fanning haciendo de la hija del villano de Blade. Estuve a su lado mientras me mostraba inverosímiles blogs de moda de una tierna inocencia que a veces parece cojuda inocencia. Estuve con ella comiendo pizza, chaufa, san antonio y pan con queso. Y por más que ella se mostraba feliz, toda despreocupada, por dentro penita se rompía y penita yo q con cucharita le sacaba una sonrisa tras las lágrimas.

Pero pasó! eso terminó. Ahora está genial. Regresó toda fabulosa y lo primero q hizo fue comprarse ropa. Por supuesto. Regia, diva, maravillosa, ropa nueva, colorida y musical. Se hizo pancito, descubrió el hornito y calentita se durmió en sueños disparejos e imposibles.

Ahora más cerca de vivir juntos, ahora con la posibilidad absolutamente tangible de poder despertar con ella y que mis noches se hagan días en su piel y poder contar pecas cual estrellas en un cielo blanco qe huele a Moschino y a futuro.

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Sanita y de compras

domingo, 1 de mayo de 2011

Pichuladas

Y entonces, qué pasó ahora? hoy no hay sonrisas, no hay colores? no hay ese corazón que abriga rico y que te hace desear más noche? Hoy lo que quema no es tanto el corazón, sino más bien el estómago. Hoy hubo poco del calor rico y en su lugar se creo un vacío. De esosque jalan lo bueno que hubo en el día y lo hunde en el fondo del estómago haciéndose un nudo que colapsa en sí mismo y se pesa y a ti también te lleva. Pues no. Hoy no hubo calor rico. Y tiene algo que ver con que seas descuidado? con que pienses únicamente en ti y no en los dos que ahora ustedes son? No es cuestión de maldad, no es algo de querer hacer daño, es simplemente ser despistado, bastante distraido, descuidado con quien quieres. No eres atento y eso te hace menos perfecto, si es que existe eso de ser un poco perfecto. Y es q es curioso como todo puede malograrse tan rápido. En un momento estás todo tibio y blando, abrigado en su piel y al otro momento te está llamando la atención desde internet y aunque entiendes lo que está sucediendo, al principio no puedes creer que sea cierto, pero lentamente te das cuenta que es verdad lo que has escuchado y ya empiezas a sentirlo en la barriga. Y entonces llamas para saber qué pasa, con la tonta sonrisa conciliadora, con esa voz a la que ella se ha acostumbrado a escuchar; pero ella no está hoy para entender. Ahora ella esta molesta, indignada. Se siente ignorada y es algo que no hiciste lo que la hizo sentir olvidada. No fuiste a ella, eso fue lo que no hiciste. Ya no te necesitaban y no corriste a ella como debió haber sido. Y tú ni si quiera te diste cuenta de lo que no estabas haciendo. Te quedaste cómodo a pasar el resto de la noche y por ese momento te olvidaste de la sonrisa con la que quieres despertar. Y mientras la llamada pasaba te ibas dando cuenta de que de nada servía esa voz que creíste la iba a calmar, que ella ya empezaba a usar el "manyas" que se le escapa cuando está ofuscada y que en la noche no iba a haber besos, ni "churro", ni "mi amor" o links de desfiles ni de dibujitos maricones que hacen sonreir. Hoy no iba a haber el "mejor novio del mundo". En su lugar habría un hueco que se iba a llevar lo bonito del día y aunque suene contradictorio, tmabién sería un peso porque vuelves a sentir que pasas la noche solo. Y entonces "no quiero verte". Un resignado "chau" y entonces ya no eres perfecto. Mandas un mensaje inútil que piensas lo leyó y soltó un "ughh... idiota" o que tal vez lo consideró pichuliento como suele hacer cuando considera que no hay nada qué hacer al respecto.

Y así es como pesa el silencio.

Reconoces que estuvo mal? que fuiste descuidado? que estando ella accidentada no prestaste la debida atención y que preferiste quedarte con tus primos jugando y hacer que ella se sienta cojuda, manyas?
Sí, sólo cuando me lo dijo comprendí. No sabía que podía ser visto así. No pensaste en ella, sólo en ti. Imagina cómo se sintió ella, que te dejaba ir porque pensaba que te necesitaban y tú contento le dices que están jugando, que ya acabó. Indignada, molesta y olvidada se fue y no te quiso ver.

Yo nunca te voy a decir algo así. Yo quiero estar siempre contigo. Siempre te quiero ver. Siempre. Y ahora por qué no volviste? Porque no se me ocurrió. Simplemente no lo pensé. Y tú sabes que siempre quiero estar contigo. Como si no lo hubiera demostrado antes. Que quiero de verdad quedarme a tu lado. Que vida, que casa, que hijita. Y tú "no te quiero ver".

Pesa y se hunde.

domingo, 24 de abril de 2011

Futuro de a poquitos

Y así de a poquitos, avanzando lento y rico, van 5 meses. y quié hubiera dicho que  la compañera de trabajo iba a estar compartiendo mi vida, quién hubira pensado que la chica de muchos colores que veía por el reflejo del monitor me estaría pidiendo unos minutos más en su cama, o que me pediría que la acompañe a sus reuniones familiares o que me pida una niña blanquita bien tranquila. Más aún, que me pida vida, que planee años por adelantado, que imagine momentos importantes conmigo, que piense en un futuro de los dos y poquito después, un futuro de los tres, con una pequeña miau miau corriendo descalza y ella mamá la levanta y la abraza, baila con ella un poco, sonríe preciosa y está que no puede más de contenta con su vida. Me lo dijo anoche, me lo dice siempre, está feliz, contenta, tranquila, segura, regia; y bueno, me gusta mantenerla así. Por eso cuando hago algo mal, estoy en falta, estoy poto y poto frío encima, pues no se siente bien. Molesta en el estómago y se queda en la cabeza, pone tenso el cuello y la hasta pesa en la espalda , porque no está bien que a ella princesa se le haga algo así, que sea yo quien a ella preciosa la haga sentir mal. Y es que ella pancito es genial, es lo mejor que me ha podido pasar. Ella es felicidad, ella es color, ella es música, ella es moda, ella es comer en sitios bonitos, ella es dormir acurrucaditos; ella es futuro, ella es vida, ella es mía.

Por eso se siente mal cuando no está. Días huecos, días vacíos, noches incompletas sin calor, sin curiosos cariños ni ojos encapotaditos. Días que no deben ser, días que pesan, noches que aplastan...

No, quiero vida con ella. Que me bese largo y rico, que sus labios se queden ahí y que despierte contenta y sea ella quiente diga que es feliz