Y aunque la noche sea corta, con apenas un par de horas de ti; pues igual se siente genial poder hundirme en tu piel, oler a Fiorellita y enternecerme con ruiditos engreídos de bambina chusquita.
Que no se acaben las noches de ti; quiero que cuando despierte estés siempre ahí.
Y miau miau en tu boca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario